En diferentes países: sus tradiciones y características. Holanda no es la excepción. Aquí es costumbre no colgar cortinas en las ventanas . Hay varias razones para la aparición de esta costumbre:
- histórico
- económico
- política
¿Por qué los holandeses abandonan fundamentalmente las cortinas?
Los residentes locales creen que no es necesario colgar cortinas para calmar, prevenir y prevenir acciones ilegales. Los residentes de Holanda bromean diciendo que por cada residente hay casi un "policía" entre los vecinos. La población local está atenta a la observancia del orden y la implementación cuidadosa de las reglas y normas de comportamiento establecidas.
Por lo tanto, las cortinas aquí no se abren, dicen, "mira, mira, no tenemos nada que ocultar. Todo es digno, noble y de acuerdo con la ley ".
¿Cómo surgió la tradición?
Después de un tiempo, el rey de España retiró a Alba de los Países Bajos. Hubo una revolución, la gente ganó.
Sin embargo, el orden de "ventanas abiertas" echó raíces entre la gente del pueblo. Lo convirtieron en una tradición que significaba "no tenemos nada que ocultar, vivimos en un cristiano justo".
Y esta característica brillante e inusual apareció en el país, lo que deja a los visitantes con una impresión sorprendente de los Países Bajos.
¡Mirar por las ventanas de otras personas no es holandés!
Asomarse a través de un vaso se considera indecente y equivale a la grosería y los malos modales . Es como mirar a alguien en el baño o a través de una cerradura. Los locales son bien educados y valoran mucho el espacio personal. Cuidan sus vidas e invaden las de otros para ellos, son malos modales.
Los turistas están un poco conmocionados por esta "apertura". Después de todo, por regla general, otros pueblos, por el contrario, construyen sus casas detrás de cercas. Incluso existe la expresión "Mi hogar es mi castillo". Sin embargo, es esta tradición la que da a las ciudades holandesas y a sus habitantes un aspecto incomparable y especial.
Esto es interesante! Cabe señalar que las ventanas en las casas locales suelen ser grandes, de pared completa, algunas incluso en el piso. Al pasar, realmente puedes ver la vida de otra persona.
Pero una buena educación y una sensación de tacto, junto con el miedo a invadir el espacio personal, les da a los ciudadanos una sensación de seguridad en su propio hogar.
¿Podrías vivir con la apertura holandesa para todos?